Se nos fue el segundo campeonato de la temporada, donde lo más importante no se jugó por el Clausura en sí, sino que lo atractivo estuvo en la clasificación a las copas, y la tabla del descenso, manteniéndose la expectativa hasta último momento.
La fecha comenzó el domingo por la mañana, donde el sanducero Elías Figueroa se vistió de héroe para llevar a Liverpool a la Copa Libertadores por primera vez en su historia. El delantero convirtió dos goles en el encuentro donde su equipo goleó 3 a 0 a Defensor, dejando a su rival de turno con el consuelo de poder disputar la Copa Sudamericana en la segunda mitad del año.
Por la tarde se jugó el complemento, donde estaban en juego la clasificación del segundo equipo a la Sudamericana y el tercer descenso. Quien comenzaba perfilándose para perder la categoría era Tacuarembó que a los 26 minutos perdía su partido 1 a 0 ante un descendido Cerro Largo. Sin embargo, Cerrito que era el otro equipo que luchaba por no descender, no tuvo una buena tarde ante una alternativa oncena de Nacional, y cayó en el Parque Central por 3 a 1, permitiéndole al equipo del norte quedarse en Primera si lograba dar vuelta el partido ante los arachanes. Y a falta de 3 minutos para el final del encuentro llegó el milagro, con gol de Franco Sosa Tacuarembó pasó a ganar y de esta manera mandó a Cerrito a Segunda División, superándolo en la tabla por 0,07 puntos, algo que solo puede pasar en Uruguay.
En lo que respecta a la clasificación a la Sudamericana, River por tercer año consecutivo logró el privilegio de disputarla, luego de empatar 2 a 2 con Wanderers en el Parque Viera, dejando sin chance a Rampla, que era el otro equipo que contaba con chances de clasificar.
Por último, Peñarol con algunos suplentes pudo salvar el invicto ante el ya descendido Atenas, logrando un agónico triunfo de la mano de Arévalo Ríos, que sobre el final del encuentro puso el 3 a 2 definitivo, en un partido que solo servía para cumplir con el fixture.
De esta manera culmina para muchos una nueva temporada, con la excepción de los equipos grandes que habrán de disputar las finales sin tener la certeza de cuando se jugarán (algo que también solo pasa en Uruguay). Todo dependerá de la suerte de los tricolores en la Copa Libertadores.
La fecha comenzó el domingo por la mañana, donde el sanducero Elías Figueroa se vistió de héroe para llevar a Liverpool a la Copa Libertadores por primera vez en su historia. El delantero convirtió dos goles en el encuentro donde su equipo goleó 3 a 0 a Defensor, dejando a su rival de turno con el consuelo de poder disputar la Copa Sudamericana en la segunda mitad del año.
Por la tarde se jugó el complemento, donde estaban en juego la clasificación del segundo equipo a la Sudamericana y el tercer descenso. Quien comenzaba perfilándose para perder la categoría era Tacuarembó que a los 26 minutos perdía su partido 1 a 0 ante un descendido Cerro Largo. Sin embargo, Cerrito que era el otro equipo que luchaba por no descender, no tuvo una buena tarde ante una alternativa oncena de Nacional, y cayó en el Parque Central por 3 a 1, permitiéndole al equipo del norte quedarse en Primera si lograba dar vuelta el partido ante los arachanes. Y a falta de 3 minutos para el final del encuentro llegó el milagro, con gol de Franco Sosa Tacuarembó pasó a ganar y de esta manera mandó a Cerrito a Segunda División, superándolo en la tabla por 0,07 puntos, algo que solo puede pasar en Uruguay.
En lo que respecta a la clasificación a la Sudamericana, River por tercer año consecutivo logró el privilegio de disputarla, luego de empatar 2 a 2 con Wanderers en el Parque Viera, dejando sin chance a Rampla, que era el otro equipo que contaba con chances de clasificar.
Por último, Peñarol con algunos suplentes pudo salvar el invicto ante el ya descendido Atenas, logrando un agónico triunfo de la mano de Arévalo Ríos, que sobre el final del encuentro puso el 3 a 2 definitivo, en un partido que solo servía para cumplir con el fixture.
De esta manera culmina para muchos una nueva temporada, con la excepción de los equipos grandes que habrán de disputar las finales sin tener la certeza de cuando se jugarán (algo que también solo pasa en Uruguay). Todo dependerá de la suerte de los tricolores en la Copa Libertadores.
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